Alrededor de 1.400 millones de personas viven sin electricidad en el mundo. Para 2.400 millones su combustible básico es la leña, el carbón, el estiércol o el keroseno. En África del Este, el 90% de la población depende de combustibles sólidos para cocinar. El costo ambiental y humano de su uso es elevado, ya que numerosas personas mueren por la inhalación de humos. Esto hace que el acceso a energías limpias sea una prioridad para conseguir alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM).
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) admite que una inversión inicial de grandes proporciones es crucial para afrontar la pobreza energética. “Ninguno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio pueden lograrse sin que haya una mejora en la calidad y cantidad de servicios energéticos en países en desarrollo”, señala un informe recientemente publicado por el PNUD.
Deforestación, contaminación, enfermedades pulmonares especialmente en mujeres y niños proliferan. Mientras, la tecnología está disponible pero a falta de financiación que la haga accesible a las pequeñas empresas energéticas. La Asociación sin ánimo de lucro Aldea Global de Energía (GVEP International) busca soluciones a esta situación y obtiene resultados.
En Kenia por ejemplo, gracias a un fondo de garantía, instituciones financieras y empresas energéticas han firmado acuerdos de préstamos que permiten a los clientes comprarles lámparas solares o cocinas mejoradas mediante cuotas asequibles. A la vez, los fabricantes de este tipo de productos reciben seminarios para avanzar técnica y económicamente.
Una cocina mejorada y bien fabricada ofrece numerosas ventajas ambientales y de salud. Puede reducir las emisiones anuales de CO2 en 0,8 toneladas, si bien su costo es tres o cuatro veces mayor. De ahí la importancia del CDM, el mecanismo de la ONU que permite a las naciones en desarrollo reducir sus emisiones de carbono mediante proyectos de energía limpia.
Sin embargo, el mercado del carbono es complejo y resulta de difícil acceso para los pequeños empresarios que más necesitan la financiación. Por ello, además de asesoría, GVEP pone a disposición pública las guías informativas que facilitan el proceso.
Los ODM fueron establecidos en la Cumbre del Milenio de las Naciones Unidas celebrada en 2000. La Declaración de Milenio fue aprobada por 189 países y firmada por 147 jefes de estado y gobierno. La fecha límite de los ODM es el año 2015 y buscan:
- Erradicar la pobreza extrema y el hambre
- Lograr la enseñanza primaria universal
- Promover la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer
- Reducir la mortalidad infantil
- Mejorar la salud materna
- Combatir el VIH/SIDA, el paludismo y otras enfermedades
- Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente
- Fomentar una asociación mundial para el desarrollo
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