Las marcas de ropa de deportes al aire libre presentan una imagen de sí muy respetuosa con el medio ambiente. Sin embargo, esta industria aún se encuentra muy lejos de acabar con el uso de sustancias químicas peligrosas. Greenpeace Alemania ha pedido a dos laboratorios independientes que analicen el contenido en sustancias tóxicas de 14 chaquetas y pantalones para la lluvia. Aunque había muchas marcas diferentes, los resultados fueron muy similares: todas las prendas contenían ácido perfluorooctanoico (PFOA).
Las que más, las prendas de las marcas Jack Wolfskin, The North Face, Patagonia, Kaikkialla y Marmot. El peligroso PFOA, como otras sustancias químicas perfluoradas (PFC), se utilizan para fabricar tejidos que sean anti-manchas o repelentes del agua. La contrapartida es que el PFOA es una sustancia química persistente. Esto significa que cuando se libera en el medio ambiente (por ejemplo, durante los procesos de producción), no se degrada y permanece en el entorno. De esta manera acaba entrando en la cadena alimentaria.
Una vez dentro de los alimentos, ya en el aire y en el agua potable, estos productos químicos llegan a nuestro cuerpo y los de otros organismos. Estudios recientes han relacionado los PFC con la disminución de la fertilidad y otros trastornos del sistema inmune. La industria textil, incluidas marcas de ropa de deporte al aire libre, tienen mucho que decir en este sentido. Algunas de ellas han cogido el testigo del cambio para sustituir las sustancias químicas que usan por alternativas seguras. En cabeza de este nuevo movimiento está la británica M&S que sigue el ejemplo de H&M. Esta ha anunciado la finalización en 2013 del uso de todos los PFC, junto con un compromiso de eliminar todas las sustancias químicas peligrosas en el 2020.
“Si dos de las mayores marcas de ropa del mundo pueden hacerlo y seguir cumpliendo con las necesidades de sus clientes, el resto no tiene excusas”, aseguran desde Greenpeace. “¿Cómo van a explicar a sus clientes que sólo puede ofrecer protección contra la lluvia a cambio de que estén expuestos a sustancias peligrosas?” La organización ecologista es responsable de la campaña desafío Detox que reta a las mejores marcas de empresas textiles a hacer los cambios necesarios, junto a sus proveedores, para eliminar todos las sustancias peligrosas de la cadena de suministro y del ciclo de vida completo de sus productos.
Imagen: Greenpeace
Más información: Resultados del estudio (en inglés)
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