Ecológico por dentro y por fuera: un film compostable nunca usado hasta ahora, a base de componentes no contaminantes, cierra el ciclo completo del producto ecológico. El nuevo bioplástico utiliza menos energía en su producción y, al poder ser reutilizado como abono para la tierra, supone un doble ahorro energético. Además, este envase ecológico conserva por ejemplo el embutido, natural y sin aditivos, durante más de 6 meses.
En su composición, el bioplástico solo utiliza materiales naturales como el almidón presente en la patata o el azúcar de diferentes cereales, o fibras vegetales como la de coco o celulosa. Esto significa que su proceso de elaboración no contamina, emite un 95% menos de CO2 y utiliza un 80% menos de energía en su fabricación. Con todo, cada tonelada de bioplástico supone la retirada de la atmósfera de 2,5 toneladas de dióxido de carbono.
En contrate, para obtener 1 kilo de plástico PET se necesitan 3,5 litros de petróleo y se emiten a la atmósfera 3,4 kilogramos de CO2. Además, su proceso de degradación se sitúa entre 100 y 300 años, frente a los 6-12 meses del bioplástico PLA (Ácido Poliláctico).
La creación de las bolsas al vacío de bioplástico compostable comenzó hace siete años. La sinergia entre VBM Ecodesign y NNZ permitió ir más allá de los primeros bioplásticos con baja resistencia al calor. Finalmente, han logrado un film termosellable y flexible, con certificado compostable, que ejerce de barrera a la humedad, gases y olores y permite envasar al vacío los alimentos, dándoles resistencia al tiempo en condiciones idóneas de conservación. Algo comprobado e implementado por la empresa alimentaria ecológica EcoRiera.
El 35% de los productos corresponde al envase, mientras que el 50% de la basura casera es de origen orgánico, un porcentaje que crecerá en los próximos años gracias al aumento de los envases compostables. Estos, una vez utilizados, pueden convertirse en compost de calidad.
Diferencia entre compostable y biodegradable
Se suele confundir el significado de "biodegradable" y "compostable", pero no significan lo mismo.
Un producto biodegradable puede descomponerse por microorganismos, pero eso no significa que el resultado final de esta descomposición sea un compost de buena calidad.
Un producto biodegradable puede contener tintas, metales o componentes que no lo hacen apto para formar un abono de utilización agrícola. Sin embargo, un producto compostable, nos garantiza que todos sus componentes son inocuos y que al descomponerse puede formar un compost de calidad.
La Biodegradabilidad y la Compostabilidad dependen en muy alto grado del medio en que se descomponen. Dado que cada medio es distinto (compostadora, suelo, agua…) y cuenta con diferentes temperaturas y diferentes microorganismos, la velocidad del proceso de biodegradación varía de unos a otros. Por ejemplo, los diferentes tipos de bioplásticos, dependiendo de su tipo, pueden ser biodegradables en una planta de compostaje industrial, en agua o en la tierra, o en una compostadora casera.
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